De acuerdo con rahyaft (los misioneros y la convierte en el sitio web)
¿Cómo comenzó la actividad de Islamic Relief en España?
Aquí en España la actividad comenzó en el 2013. Nos inscribimos como fundación. En Barcelona se creó la sede inicial, pero también había grupos de voluntarios en Madrid. Y así ha sido el procedimiento que hemos seguido en el resto de ciudades a nivel nacional. Hemos empezado con un grupo de voluntarios que han ido realizando actividades de sensibilización y recaudación y hemos ido creciendo. En la actualidad, la oficina central está en Barcelona. También hay una oficina en Madrid, en Fuenlabrada. Son las dos oficinas que tenemos a nivel nacional. Luego tenemos voluntarios en 14 ciudades, en todas las capitales provinciales de Cataluña, en la Comunidad Valenciana, Murcia, Granada y Bilbao y vamos creciendo.
¿Qué puedes decirnos de las campañas que realizais?
En cuanto a las campañas están todas encuadradas dentro del ámbito del desarrollo sostenible y van desde el agua hasta las emergencias, como las inundaciones de Pakistán. También está el proyecto de apadrinamiento de huérfanos, que es en lo que estamos centrados actualmente. Tenemos campañas de invierno, que será la siguiente. En Ramadán realizamos proyectos de nutrición principalmente. Esta es una campaña islámica, pero cabe señalar que la ayuda siempre la proporcionamos a personas con independencia de su religión, sexo, etnia u otros factores. La sola excepción es la del zakat el-fitr, que obligatoriamente tiene que ir a musulmanes.
Trabajamos en más de 40 países. Algunos de ellos tienen una oficina que se encarga de repartir la ayuda. En otros casos se hace a través de una oficina próxima, como es el caso de Siria, donde no tenemos oficina y la ayuda se realiza a través de Turquía. Trabajamos en todo el centro de África y el Cuerno de África, en gran parte de Asia, como Asia del Sur (Pakistán, Bangladesh etc) y en Asia Occidental (Pakistán, Siria y Yemen).
En España también hemos repartido ayudas. Nosotros clasificamos las oficinas en dos tipos: oficinas de terreno, cuya misión es exclusivamente repartir las ayudas, y oficinas de sensibilización, cuya misión es sensibilizar y recaudar, pero ahora España es un híbrido de ambos, es decir, que recaudamos para proyectos externos y también realizamos algunos proyectos internamente. Esto comenzó con la COVID. La situación en España con la pandemia empeoró bastante y había mucha gente que no llegaba a fin de mes o no tenía para comer. Los voluntarios salieron de sus casas a pesar del riesgo y pudimos repartir paquetes de alimentos en Madrid y en Cataluña. Este proyecto ha ido evolucionando poco a poco. Ahora no repartimos paquetes de alimentos, sino vales, que protegen un poco más la dignidad de receptor y así pueden comprar ellos lo que quieran. Esto está muy enfocado en los asentamientos en Almería.
¿Cómo se finanza la organización?
La financiación se realiza a través de donaciones de entidades y empresas y de particulares.
El trabajo se realiza principalmente a través de voluntarios, aunque tenemos algunos empleados. En Madrid por ejemplo somos tres empleados y en Barcelona son cinco personas en diferentes departamentos. Tenemos el departamento de administración, que se encarga de todo el tema administrativo, seguimiento de donaciones, el contacto con Islamic Relief Internacional de Birmingham, que es la sede a la que llegan las donaciones y luego se encarga de ponerse en contacto con las oficinas del terreno y todo el tema de la atención al donante. Hay un departamento que es solo para voluntarios, que es el que estoy yo y dos chicas más en Cataluña. Nuestras funciones son hacer actividades, eventos para sensibilizar a la población y recaudar. Está el departamento de programas, en el que está mi compañera Hana de Madrid, que supervisa tanto los programas que realiza Islamic Relief aquí en España como los que se realizan en otros países con financiación española. Y luego está el tema de finanzas que lleva una compañera dentro del departamento de administración.
Nosotros intentamos concienciar a nuestros donantes para que sus donaciones no sean puntuales, según las emergencias que se vayan produciendo, porque siempre hay emergencias. Tenemos un fondo de emergencias para que siempre que ocurra una podamos actuar. Hay muchísimas campañas. Ahora estamos enfocados en el apadrinamiento de huérfanos. De hecho tenemos una gira benéfica en toda España, en seis ciudades enfocada en obtener fondos para poder apadrinar a huérfanos y costear sus necesidades básicas, como sanidad, educación etc. Pronto será invierno y estas necesidades se agravarán en los campamentos. Estamos con varias campañas a la vez porque las necesidades son varias.
A veces hemos usado internet por medio de mensajes de texto para recibir donaciones. Se hizo en colaboración con Córdoba Internacional. Al final tienes que tener una plataforma en la que hacerlo. En las cadenas nacionales es muy complicado. Hay que tener en cuenta el público con el que trabajamos, ya que, aunque estamos abierto a todos, es principalmente un público de la comunidad musulmana. Tener un anuncio en las cadenas de televisión nacional para lanzar una iniciativa de este tipo es una inversión grande y si te van a responder un 1% de los que lo vean, no sé hasta qué punto es conveniente hacerlo.
Se puede pagar el zakat anual durante todo el año. Se pueden hacer donaciones puntuales o regulares de tres formas: por la página web, que es a través de tarjeta bancaria; a través de una cuenta bancaria o domiciliación y también en efectivo en cualquiera de las oficinas.
¿Cuál ha sido la respuesta del público español a vuestras actividades?
La respuesta ha sido buena. Estoy contenta y cada vez se van uniendo más personas. Creo que era algo necesario. El ver a la comunidad musulmana haciendo algo por la sociedad echa abajo la idea que tienen algunas personas de que estamos en guettos o haciendo cosas solo para nosotros mismos. Y el tener espacios donde se respete tu libertad religiosa, eventos donde te sientas cómodo porque no hay alcohol y hay contenido islámico es muy beneficioso. También el que haya plataformas donde se pueda pagar fácilmente el zakat. Aparte de las mezquitas, que han hecho muy buen trabajo, no había otro sitio. Y también se pueden hacer donaciones en Ramadán etc.
Aparte del Reino Unido y España estamos en otros países como Francia, Alemania, Holanda, Bosnia-Herzegovina, Turquía etc. También en EEUU y Canadá. En cuanto a la organización de las campañas actuamos conjuntamente. Hay un comité. Sí que nos guía el centro de Birmingham en cuanto a las necesidades, pero al final cada país decide en qué centrarse según el público que tiene. Hay una comunicación entre nosotros y tenemos un foro de todos los países donde vemos donde hay que invertir los esfuerzos.
¿Cómo son los voluntarios que trabajan con vosotros?
En cuanto a los voluntarios, la mayoría son jóvenes. Tenemos a gente que no es joven y que participa, pero la mayoría son jóvenes. Aunque este no era el objetivo inicial hemos visto que hay jóvenes que buscaban un espacio sano, donde poder ser musulmanes sin ser juzgados y donde desarrollarse como personas. De aquí salen muchos jóvenes amigos que deciden luego colaborar no solo en el campo humanitario y también aprenden más sobre islam. Muchos realizan tareas de voluntariado luego también en hospitales, residencias de ancianos etc. Hemos lanzado la iniciativa de limpiar mezquitas. Es cierto que hay muchas de ellas que tienen un personal cualificado y que no han participado en esta campaña. En Madrid nació también una de las iniciativas de las que estamos más orgullosos que es el bocadillo solidario. Se trataba de que un grupo de voluntarios repartieran bolsas con comida: un bocadillo, una pieza de fruta, agua y zumos. Y los repartíamos entre la gente que está sin hogar en Madrid, que son muchos. Es una iniciativa que se hace a nivel nacional. Siempre estamos buscando iniciativas que puedan beneficiar a la sociedad.
¿Qué tipo de eventos realizais?
Tenemos dos eventos anuales que siempre realizamos a nivel nacional. Uno de ellos es la Noche de la Esperanza. Los actos consisten en ponencias y conciertos benéficos. Luego, en Ramadán, siempre tenemos un iftar benéfico para recaudar fondos. A veces lo hemos hecho en Fuenlabrada, otras en Parla. No hay un sitio fijo.
¿Y en cuanto a los proyectos?
Hay muchos proyectos y podríamos hablar largo y tendido de ellos. Están los proyectos de agua que son muy necesarios, la emergencia del Cuerno de África, que aunque ya no se hable de ella sigue estando presente y es muy impactante. Este año estuvimos en Kenia y es algo que no se puede olvidar. Mi consejo es que la gente se informe de lo que estamos haciendo y en la página web hay muchísima información. También tenemos redes sociales como facebook, instagram e incluso tik tok, que es mucho más visual y recomiendo a todos que se mantengan informados y vean que desarrollamos muchas actividades, tanto para jóvenes como para el público en general, en las que la gente se lo puede pasar bien y a la vez colaborar con una causa. Hace poco tuvimos una actividad de patinaje sobre hielo humanitario, en el Palacio de Hielo de Leganés, donde por el mismo precio que sale una sesión de patinaje sobre hielo estuvieron colaborando con una causa. También hacemos senderismo y otras actividades.
¿Qué dirías a los que desconfían en hacer donaciones?
Mi consejo a los desconfiados es que vengan y se acerquen y se informen porque la mayoría de los prejuicios tienen que ver con la ignorancia. Podemos demostrar que el dinero llega y adónde va y el porqué se destina a una campaña. Hacemos auditorías y hay un informe anual. Al estar inscritos como fundación estamos también auditados. Les decimos a la gente que se acerquen y se informen.
¿Estáis vinculados a alguna organización o corriente específica?
Nosotros somos una fundación independiente. No estamos vinculados a otra organización musulmana ni a una corriente específica, ni política ni religiosa.
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