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El Centro Cultural Islámico de Leganés, en buenas manos

En una de las mezquitas más grandes y famosas de la Comunidad de Madrid, nos recibe el
doctor Yasser, presidente del Centro Cultural Islámico de Leganés, dispuesto a responder
abiertamente a todas las preguntas y con una sonrisa en la cara.

De acuerdo con rahyaft (los misioneros y la convierte en el sitio web) 

En una de las mezquitas más grandes y famosas de la Comunidad de Madrid, nos recibe el
doctor Yasser, presidente del Centro Cultural Islámico de Leganés, dispuesto a responder
abiertamente a todas las preguntas y con una sonrisa en la cara.

¿Cómo es tu rol como presidente de la mezquita? ¿Y cuáles son tus
responsabilidades diarias?

En primer lugar, debo decir que las responsabilidades en una mezquita son numerosas,
pero la más importante, como presidente, es saber dirigir. ¿Por qué? Porque la gente
piensa que como presidente tienes que saber hacer de todo, pero este no es mi rol.
Las tareas tienen que ser divididas simplemente por un tema de eficiencia. Hay gente
que sabe hacer unas cosas y otros otras. Por ejemplo, no todo el mundo puede recibir
a personalidades públicas como un alcalde. De esta manera, otra facultad importante
del presidente es elegir a las personas que pueden ser más adecuadas para cada
función.

Hay que tener en cuenta un factor clave y es que son trabajos voluntarios. Por
consiguiente, te encuentras a gente que no tiene la capacidad para hacer ciertas
funciones, pero quiere llevarlas a cabo. Hay que saber manejar esta situación porque,
además, hay que hacer que las cosas salgan adelante y al no ser un empleo como tal el
liderazgo hay que ejercerlo con un carácter más cercano y relajado.
Asimismo, hay que tener una autoestima alta. Muchas veces recibes insultos y hay que
tener mano izquierda para enfrentarse a estas situaciones. Como puedes ver, ser líder
no es fácil.

¿Te quita mucho tiempo?

Llevo mucho tiempo siendo presidente, ya ni me acuerdo cuánto, más de 10 años
seguro. A veces sí me quita mucho tiempo: llamadas de teléfono, escribir correos, etc.
A veces tenía que coger días de vacaciones para hacer cosas en la dirección como por
ejemplo la firma electrónica o cosas de abogados. Eso, a veces, es complicado porque
las vacaciones de trabajo son limitadas en el tiempo y no olvidemos que todo esto es
voluntario. Lo hacemos encantados, por supuesto, pero también quita tiempo. Alguna
vez me han dado algún aviso en el trabajo porque tenía llamadas urgentes de la
mezquita y estaba en horario laboral. Sin embargo, actualmente, intento limitar estas
situaciones usando por ejemplo el correo electrónico, enviando a otra persona, etc.

¿Qué actividades y eventos se llevan a cabo regularmente en la mezquita?

Con relación a las actividades intentamos hacer las actividades del imam, como por
ejemplo las charlas del hadith , de interpretación del Corán o recitación del Corán y
también damos charlas a jóvenes de vez en cuando trayendo personas externas. La
semana que viene tenemos un invitado que conoce hasta 10 formas de recitación,
posteriormente, tendremos a un experto en dawa que llega directamente desde
Egipto. De esta manera, buscamos atraer más gente y, especialmente, a los jóvenes. Al
mismo tiempo, tenemos una asociación cultural que se llama AJE que también tiene
muchos jóvenes y organiza actividades con el ayuntamiento, entre otros.

¿Cuáles son los retos más importantes que tienes como presidente?

Hay varios retos. Uno de ellos son las críticas no constructivas. Es decir, criticar por
criticar. Otro reto, la financiación. Por ejemplo, nos gustaría tener otro sitio más
grande para el colegio de los niños o hacer un negocio para la mezquita. Esos también
son retos. Y también, cómo formar a las personas para que sean responsables. A veces
hay gente que viene del campo y no sabe qué significa la palabra mezquita tan​
siquiera. Entonces, a veces estas personas critican lo que ven sin saber. Por ejemplo, si
ven eventos conjuntos de chicos y chicas se ofenden y critican. Actualmente, los
jóvenes están mezclados en todos los sitios: mercados, tren, metro, etc. Y no pasa
nada. Pero esa mentalidad cerrada es un problema. Obviamente, el imam juega un
papel clave en cambiar la mentalidad de la gente, pero no es fácil. Otros retos son
atraer a los jóvenes a las mezquitas y que tomen la iniciativa de llevar a cabo
actividades sin nuestro impulso y el de las mujeres. Muchas veces no es fácil llegar a
ellas porque, por lo general, no tenemos una conexión directa con ellas y tienen sus
propias dinámicas.

¿Cuál es el logro más gratificante que has conseguido como presidente?

A nivel del centro un logro tremendo fue construirlo con esta área tan grande. La
primera mezquita en la que estuvimos no llegaba a 60 metros cuadrados, la segunda
tenía 200 metros cuadrados, la tercera tenía 450 y la actual ronda los 1.000 metros
cuadrados. Esta mezquita ya tiene mucho tiempo. Yo llevo desde su inauguración, es
más estuve en el proceso de compra. Tuvimos algunas complicaciones en la
negociación de compra puesto que había algunas condiciones que no eran adecuadas.
Yo ví estas complicaciones y renegociamos todos. Gracias a ello, conseguimos con el
paso del tiempo hacernos en propiedad con las dos naves que constituyen la mezquita.

¿Cuál es el perfil demográfico de la gente que acude a la mezquita? ¿Hay mucha
afluencia?

Tenemos de todo. Tenemos pakistaníes, marroquíes, egipcios, argelinos, palestinos,
jordanos, sirios, etc. No puedo decir de todos los sitios al 100% pero sí, es muy variado.
En cuanto a la afluencia, en el yumu’ah vienen hasta 2.000 personas. En cuanto a nivel
cultura, tenemos desde personas doctoradas hasta albañiles, personas que tienen
solamente la primaria.

¿Qué programas o servicios se ofrecen para satisfacer las necesidades de diferentes
grupos como las mujeres, los jóvenes o las personas mayores?

Para los niños tenemos el colegio que tiene lista de espera para nuevas inscripciones.
Para mujeres tenemos clases también de lectura de Corán, por ejemplo. Para los
jóvenes, como te dije, organizamos charlas. Intentamos satisfacer a todos los grupos,
pero no es fácil por recursos y tiempo.

Aparte de estos cursos, ¿hay alguna forma de fomentar la interacción social de los
asistentes a la mezquita para mejorar el espectro social de la comunidad?

La asociación de jóvenes de la que te hable antes, AJE, tiene chicos y chicas y lleva a
cabo múltiples actividades y también ITJE. ITJE empezó desde aquí y ya ha cumplido 7
años. Hemos creado 3 cursos para enseñar diferentes aspectos del islam para los
jóvenes que están interesados.

¿Cómo se abordan los problemas o cuestiones individuales? Entiendo que el imam
atiende a todas las personas cuando tienen algún tipo de problema personal o
necesitan consejo religioso, etc. Pero desde la propia administración, ¿se hace algo al
respecto?

Nosotros nunca hemos dicho no a nadie que quisiera hablar con nosotros. A veces,
viene gente que ha recibido una carta del banco, de la administración o lo que sea y no
sabe leerla y le ayudamos. O intermediamos cuando tienen que hablar con algún
abogado si tiene dificultades de comprensión. Este tipo de cosas sí que hemos
ayudado desde la administración. A veces el imam no está, y también te cuentan el
tema que les preocupa. Entonces, con tu conocimiento intentas ayudar en lo que
puedas. ​

Tras esto, nos despedimos y nos conminamos a encontrarnos de nuevo. Leganés se muestra
abierta y despierta a la llegada de cualquier persona que quiera aprender, conocer y, sobre
todo, ser parte de la comunidad musulmana en España.

 

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