Se considera pecado cualquier comportamiento que viole los mandatos divinos. Hay dos clases de pecados: los pequeños y los graves.
El Sagrado Corán es uno de los libros divinos que ha prohibido estrictamente a sus lectores la emulación ciega e irrazonable.
De acuerdo con los principios islámicos, Dios solo aceptará acciones verdaderamente puras; es decir, buenas obras que van acompañadas de fe y buenas intenciones.
La juventud es un período de la vida que es muy importante para definir y moldear el carácter de uno. Hay algunas características en la juventud que el Sagrado Corán alaba.
Hay mucho énfasis en el Sagrado Corán en el pensamiento y la reflexión, porque la reflexión ayuda a evitar perder el camino correcto, o puede ayudar a encontrarlo.
El Barzakh (purgatorio) es una etapa entre este mundo y el más allá que nos prepara para pasar de la etapa mundana al otro mundo.
Ikhlas, que significa pureza de alma, es una característica que completa cada acción de los individuos y requiere una mejora personal para lograrlo.
El Profeta Hud (P) dedicó más de 700 años a guiar a su pueblo hacia la verdad, pero la mayoría de ellos se negaron a aceptar la verdad.
Hay varios versos en el Corán que señalan el destino de aquellos que niegan a Dios y el Día del Juicio. Dios les ha advertido de varias maneras y Sura As-Sajdah (as-saydah) contiene la promesa de Dios de un castigo severo para estas personas.
El Sagrado Corán y el Santo Profeta (BPD) se refieren a los sueños y sus efectos como temas importantes.